bicho y gordi

es una historieta que sale en la revista Lúpin . sus protagonistas son bicho, gordi y bubi . pero la historieta solo se llama bicho y gordi ¿al bubi lo habrán puesto despues ? . tiene un auto viejo que en el lugar de la patente tiene un cartel que dice sin y no tiene techo. siempre se rompe y hay que empujarlo. bicho es flaco alto y es el más responsable de los tres , es piloto ( o al menos sabe pilotear) y es el lider de la pandilla, el gordi es un vago que quiere ser seductor, dormir y sacar tajada de las situaciones, y el bubi es grandote fuerte, violento y tonto parecido al personaje del vasquito. el único que tiene novia fija es el bubi la novia se llama alicia y va a un colegio privado ya que usa jumper y medias blancas. siempre está estudiando y repudiandolo a bubi por ser un vago bubi cada tanto se quiere reivindicar ante sus ojos y a veces lo logra cuando gana alguna recompensa o algun dinero de manera inesperada. los malos son casi siempre los mismos de la historieta Resorte el ayudante del profesor o sea cara de tomate que es el secuaz un poco cobarde y el jefe que lo hace trabajar al ayudante y es el ideologo de las fechorias. pero lo que a mi siempre me gusta más de esta historieta como de otras del mismo autor son los paisajes, los chalets californianos, las calles anchas, el cohetodromo, los parques donde van a hacer picnics los chicos, las nubes y los atardeceres. y los miles de cartelitos contra el tabaco, la contaminacion y otras cosas malas que estan en todas partes y a los que los personajes son indiferentes en una misma pared o escritos en el mismo auto los carteles van cambiando sin que nadie los vea, lea o les preste la menor importancia en la historia. como esas historias de oski o de landrú en que a los gatitos les va pasando otra historia paralela a la de los protagonistas humanos.
abrí la Lúpin el otro día después de no sé... ¿diez años? y ahí estaban bicho, gordi, bubi y alicia eternos adolescentes de los sesenta, que lo eran cuando yo tenía nueve años, cuando yo tenía quince y ahora que tengo treinta y cinco.
espero que no se separen nunca, que no envejezcan nunca, que sigan en su auto sin patente ni nafta con su winco portatil hacia el próximo picnic en los suburbios de una buenos aires que quizas nunca halla existido.

para leer la historieta vayan a la pagina de la revista lúpin